GORRAS CON PROTECCIÓN SOLAR, ALTERNATIVA A LOS PAÑUELOS ONCOLÓGICOS

Los pacientes oncológicos tratados con quimioterapia o radioterapia pueden sufrir de efectos secundarios que afectan a la piel, al cabello y al aspecto físico en general. Por este motivo, los tres puntos más importantes para el cuidado de la piel durante los tratamientos oncológicos son la higiene, la hidratación y la protección, en concreto la protección solar.

Los fármacos utilizados en la quimioterapia afectan especialmente a las células de la piel y sus anexos (pelo y uñas). Una buena protección solar es vital para evitar lesiones producidas por la exposición solar, la aparición de arrugas, irritaciones, manchas o sequedad excesiva. Por esta razón, la personas que están en tratamiento deben protegerse correctamente de la radiación solar y hidratar su piel con productos aptos para este uso. 

Las zonas que más deben protegerse son el rostro y la cabeza en casos de alopecia o falta de densidad capilar. La cara y la nariz es la zona predispuesta a tener cáncer de la piel o de sufrir lesiones solares.

En Animare, centro integral para personas afectadas de cáncer ofrecen una amplia gama de gorras con protección solar, turbantes, pañuelos y otros complementos textiles, que te ayudarán a verte mejor ante el espejo. Las gorras de protección solar son ideales para actividades al aire libre.

Las gorras oncológicas con protección solar se pueden usar como alternativa a la peluca o en combinación con ella. Todos los modelos que se ofrecen están fabricados para que resulten fáciles de colocar. Los tejidos utilizados son ligeros y cómodos, como el algodón y la fibra de bambú o lino, combinados con seda, gasa, lana o tejido polar según la estación del año.

Consejos para evitar lesiones producidas por la luz solar 

Para evitar las lesiones producidas por la exposición solar, el paciente debe seguir estos sencillos consejos:

• Evitar los horarios centrales, de 10 a 16 horas, en que las radiaciones solares son más intensas.
  
  
• Usar gorras, pañuelos, turbantes, guantes y ropa adecuada con protección solar para evitar quemaduras.
  
  
• Utilizar crema de protección solar resistente al agua y con un factor 50 o mayor en toda la superfície corporal. Colocarlo 30 minutos antes de la exposición y renovarlo cada dos o tres horas para que sea efectivo.
  
  
• Utilizar protección labial.
  
  
• Hidratar correctamente la piel. Mejor si se utilizan productos 100% ecológicos.
  
  
• Llevar una dieta adecuada y equilibrada.

Es importante que todo paciente que lleve a cabo una tratamiento de radioterapia consulte a su médico de los riesgos de la exposición solar y las precauciones que se deben de seguir a la hora de exponerse a la luz solar.